Nuestra Empresa

Quiénes Somos

Nuestra historia, un legado tejido con amor y acero. Hace más de cuatro décadas, Carlos Alberto Márquez Londoño soñó con proteger los campos y hogares de Tuluá. Con sus propias manos comenzó a entrelazar alambre galvanizado, pieza tras pieza, hasta formar las primeras mallas que darían nombre a FABRIMALLAS. Su dedicación, su palabra empeñada y el cariño por su gente hicieron que, muy pronto, la empresa se convirtiera en sinónimo de confianza y seguridad en todo el corazón del Valle del Cauca.

Hoy ese sueño late con la misma fuerza en las manos de su hijo, Julián Márquez. Con la pasión heredada y la mirada puesta en el futuro, Julián ha llevado nuestra marca más allá de las montañas que nos vieron nacer, llegando a nuevos departamentos y conquistando proyectos de toda escala. Cada metro de malla, cada gavión y cada cerramiento que sale de nuestro taller lleva impreso algo más que acero: lleva la historia de una familia que ama lo que hace y el compromiso de proteger lo que más amas.

Porque en FABRIMALLAS no solo soldamos tubos y entretejemos alambres; soldamos generaciones y entretejemos sueños. Seguimos creciendo, sí, pero sin olvidar de dónde venimos ni el propósito que nos une: brindar seguridad que perdura y un servicio que se siente tan cercano como un apretón de manos entre vecinos.

Gracias por confiar en nuestra familia para cuidar la tuya.